Devocional para hoy,
Viernes 16 de Marzo, 2018.
“En Memoria de Hilario y Marcelina”
Por: CF Jara
Leer: Amós 8
«Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran mentira, y los que defraudan en su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos.» Malaquías 3:5
El mensaje para hoy era uno diferente, sin embargo, al leer la triste noticia acerca de la muerte trágica de los padres de seis niños, cambió la necesidad: había que ser solidarios y manifestar nuestro enojo a través de compartir una vergonzosa verdad escondida por la prensa y aun por todos los políticos de este país. Jesús vino a la tierra a denunciar al poder gubernamental, oligarca y religioso que sometía a los más pobres y desposeídos. Y si el Hijo de Dios criticó a los líderes políticos, ¿no es de nosotros Sus seguidores hacerlo también?
Hilario y Marcelina eran los nombres de los fallecidos, ambos inmigrantes indocumentados que en la mañana de ayer Jueves 15 se dirigían a trabajar luego de haber dejado a dos de sus niños en la guardería y a los cuatro restantes en sus escuelas. En un punto de la carretera fueron parados por la Migra, pero al ver a los oficiales bajarse de su carro, Hilario arrancó provocando la persecución. Tristemente millas más adelante, el carro se estrelló contra un poste de luz y los dos murieron. En el portal de noticias donde se reporta esta tragedia, mis ojos no daban crédito a lo que leía, miles comentaban con satisfacción e incluso con alegría… Dolor e indignación llenaron mi alma, y sentí que era tiempo de compartir públicamente la verdadera razón por la que se está deportando a millones de hombres y mujeres que viven en este país sin documentos. Es uno de los más grandes actos delincuenciales orquestados por el propio gobierno, el congreso y por la oficina del seguro social. Necesitaba cambiar el tema original del Devocional. Espero me perdonen, pero es necesario que los que no saben, sepan para que lo compartan y ayuden a regar la verdad acerca de esta inmensa ignominia.
La última amnistía migratoria tuvo lugar en 1986. Desde entonces hasta el 2006, han pasado 20 años donde, según datos del Pew Research Center y de otros movimientos activistas, 15 millones de personas trabajaron con documentos falsos, aportando al seguro social un promedio de $100 semanales, lo cual a la fecha sumaría: 15 millones x 20 años x $100 semanales x 52 semanas = $1.560.000.000.000, osea un mil quinientos sesenta BILLONES de dólares. El caso es que el gobierno, el congreso y el poder económico de este país se han negado a conceder la amnistía a todos estos ciudadanos sin papeles porque habría que devolverles todos sus aportes en seguros de salud, Medicaid y pensiones de retiro, lo cual QUEBRARÍA al Seguro Social y al mismo gobierno. Esto se llama FRAUDE, plano y sencillo. Y la prensa lo ha encubierto.
Lo inaudito es que entre los que hablan en contra de estos seres humanos sufridos e indefensos están millones de retirados que ignoran que sus pensiones son pagadas con el dinero que les fue debitado a aquellos que odian tanto. Este gigantesco dolo fue planificado y perpetrado en el gobierno de G. Bush y apoyado por los dos siguientes, quienes han ordenado redadas inmisericordes sin importarles la destrucción que están causando en millones de vidas, entre ellas la de estos seis niños cuyo destino ha quedado marcado para siempre, con la falsa premisa de tener un país seguro, como si los inmigrantes indocumentados fueran los que provocan las masacres masivas o los atentados como el 11-S. Hasta donde yo sé, estos humildes ciudadanos de diferentes países de nuestra América morena han venido acá forzados por razones ajenas a su voluntad, pero originadas en esos mismos círculos de poder. Pero ese es tema de otro mensaje.
Hermanos, indignarse ante las injusticias no es pecado sino el no hacerlo lo es. El Señor Jesús dijo “Haced como Yo”. Y si Êl fue duro, tajante y directo con los opresores de los pobres y humildes, entonces nosotros Sus seguidores debemos también serlo. No hay otra alternativa. Los cristianos que no levantan sus voces ante las injusticias sociales no honran a quien dicen servir. Jesús los llamó “sepulcros blanqueados”, “címbalos relucientes que restañan vacíos y tristes.”
Este ministerio no quiere ser un sepulcro blanqueado y predicará Palabra en contra de toda injusticia, venga de donde venga y de quien sea que venga. Que el Cordero Santo nos encuentre intercediendo por otros no solo en oración sino con obras. Las obras de la fe deben ser obras llenas de amor, porque como dicen Antonio Carmona “obras son amores y no buenas razones” y el apóstol Santiago “la fe sin obras es muerta”, quienes decimos ser cristianos debemos ser fértiles en obras de amor, solidaridad, compasión, caridad, respaldo, misericordia y piedad. Que el Dios Eterno tenga misericordia de nosotros.
Oración
«Padre amado, hoy oramos e intercedemos por las vidas de esos seis niños que Tú conoces quiénes son, cuáles son sus nombres, dónde están ahora y qué cosas están pasando por sus mentes y corazones, porque Tú eres el Dios omnisciente, omnipresente y omnipoderoso que lo ves todo, lo sabes todo y lo conoces todo. Ten misericordia te rogamos Señor, no desampares a estas pequeñas criaturas tuyas, Tus pequeñitos. La tragedia ha golpeado sus vidas, no los desampares, que Tus ángeles los rodeen en todo tiempo y en todo lugar para que ningún plan del malvado en contra de ellos prospere. Te rogamos que recojas en Tu misericordia a Hilario y Marcelina, pero sobre todo, que Tu bendición, protección, misericordia y provisión estén con los hijos de estos hermanos, en todos los días de sus vidas, te lo pedimos humildemente en el nombre de tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén y amén.»
התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.
Lea la Biblia en un año: Deuteronomio 28-29; Marcos 14:54-72
Descargue el Mensaje de hoy en PDF: En Memoria de Hilario y Marcelina
Viernes 16 de Marzo, 2018.
“En Memoria de Hilario y Marcelina”
Por: CF Jara
Leer: Amós 8
«Y vendré a vosotros para juicio; y seré pronto testigo contra los hechiceros y adúlteros, contra los que juran mentira, y los que defraudan en su salario al jornalero, a la viuda y al huérfano, y los que hacen injusticia al extranjero, no teniendo temor de mí, dice Jehová de los ejércitos.» Malaquías 3:5
El mensaje para hoy era uno diferente, sin embargo, al leer la triste noticia acerca de la muerte trágica de los padres de seis niños, cambió la necesidad: había que ser solidarios y manifestar nuestro enojo a través de compartir una vergonzosa verdad escondida por la prensa y aun por todos los políticos de este país. Jesús vino a la tierra a denunciar al poder gubernamental, oligarca y religioso que sometía a los más pobres y desposeídos. Y si el Hijo de Dios criticó a los líderes políticos, ¿no es de nosotros Sus seguidores hacerlo también?
Hilario y Marcelina eran los nombres de los fallecidos, ambos inmigrantes indocumentados que en la mañana de ayer Jueves 15 se dirigían a trabajar luego de haber dejado a dos de sus niños en la guardería y a los cuatro restantes en sus escuelas. En un punto de la carretera fueron parados por la Migra, pero al ver a los oficiales bajarse de su carro, Hilario arrancó provocando la persecución. Tristemente millas más adelante, el carro se estrelló contra un poste de luz y los dos murieron. En el portal de noticias donde se reporta esta tragedia, mis ojos no daban crédito a lo que leía, miles comentaban con satisfacción e incluso con alegría… Dolor e indignación llenaron mi alma, y sentí que era tiempo de compartir públicamente la verdadera razón por la que se está deportando a millones de hombres y mujeres que viven en este país sin documentos. Es uno de los más grandes actos delincuenciales orquestados por el propio gobierno, el congreso y por la oficina del seguro social. Necesitaba cambiar el tema original del Devocional. Espero me perdonen, pero es necesario que los que no saben, sepan para que lo compartan y ayuden a regar la verdad acerca de esta inmensa ignominia.
La última amnistía migratoria tuvo lugar en 1986. Desde entonces hasta el 2006, han pasado 20 años donde, según datos del Pew Research Center y de otros movimientos activistas, 15 millones de personas trabajaron con documentos falsos, aportando al seguro social un promedio de $100 semanales, lo cual a la fecha sumaría: 15 millones x 20 años x $100 semanales x 52 semanas = $1.560.000.000.000, osea un mil quinientos sesenta BILLONES de dólares. El caso es que el gobierno, el congreso y el poder económico de este país se han negado a conceder la amnistía a todos estos ciudadanos sin papeles porque habría que devolverles todos sus aportes en seguros de salud, Medicaid y pensiones de retiro, lo cual QUEBRARÍA al Seguro Social y al mismo gobierno. Esto se llama FRAUDE, plano y sencillo. Y la prensa lo ha encubierto.
Lo inaudito es que entre los que hablan en contra de estos seres humanos sufridos e indefensos están millones de retirados que ignoran que sus pensiones son pagadas con el dinero que les fue debitado a aquellos que odian tanto. Este gigantesco dolo fue planificado y perpetrado en el gobierno de G. Bush y apoyado por los dos siguientes, quienes han ordenado redadas inmisericordes sin importarles la destrucción que están causando en millones de vidas, entre ellas la de estos seis niños cuyo destino ha quedado marcado para siempre, con la falsa premisa de tener un país seguro, como si los inmigrantes indocumentados fueran los que provocan las masacres masivas o los atentados como el 11-S. Hasta donde yo sé, estos humildes ciudadanos de diferentes países de nuestra América morena han venido acá forzados por razones ajenas a su voluntad, pero originadas en esos mismos círculos de poder. Pero ese es tema de otro mensaje.
Hermanos, indignarse ante las injusticias no es pecado sino el no hacerlo lo es. El Señor Jesús dijo “Haced como Yo”. Y si Êl fue duro, tajante y directo con los opresores de los pobres y humildes, entonces nosotros Sus seguidores debemos también serlo. No hay otra alternativa. Los cristianos que no levantan sus voces ante las injusticias sociales no honran a quien dicen servir. Jesús los llamó “sepulcros blanqueados”, “címbalos relucientes que restañan vacíos y tristes.”
Este ministerio no quiere ser un sepulcro blanqueado y predicará Palabra en contra de toda injusticia, venga de donde venga y de quien sea que venga. Que el Cordero Santo nos encuentre intercediendo por otros no solo en oración sino con obras. Las obras de la fe deben ser obras llenas de amor, porque como dicen Antonio Carmona “obras son amores y no buenas razones” y el apóstol Santiago “la fe sin obras es muerta”, quienes decimos ser cristianos debemos ser fértiles en obras de amor, solidaridad, compasión, caridad, respaldo, misericordia y piedad. Que el Dios Eterno tenga misericordia de nosotros.
Oración
«Padre amado, hoy oramos e intercedemos por las vidas de esos seis niños que Tú conoces quiénes son, cuáles son sus nombres, dónde están ahora y qué cosas están pasando por sus mentes y corazones, porque Tú eres el Dios omnisciente, omnipresente y omnipoderoso que lo ves todo, lo sabes todo y lo conoces todo. Ten misericordia te rogamos Señor, no desampares a estas pequeñas criaturas tuyas, Tus pequeñitos. La tragedia ha golpeado sus vidas, no los desampares, que Tus ángeles los rodeen en todo tiempo y en todo lugar para que ningún plan del malvado en contra de ellos prospere. Te rogamos que recojas en Tu misericordia a Hilario y Marcelina, pero sobre todo, que Tu bendición, protección, misericordia y provisión estén con los hijos de estos hermanos, en todos los días de sus vidas, te lo pedimos humildemente en el nombre de tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén y amén.»
התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.
Lea la Biblia en un año: Deuteronomio 28-29; Marcos 14:54-72
Descargue el Mensaje de hoy en PDF: En Memoria de Hilario y Marcelina
No hay comentarios.:
Publicar un comentario