"Predicando la Verdad"

Miércoles 5 de Octubre, 2016.
Testimonios de los Tiempos del Fin

Estudio Bíblico
“Predicando la verdad”
(Por: CF Jara)

Versículo para hoy: Romanos 8:19-23
«Porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios.» Romanos 8:21

                                            PARTE 1
I. Introducción
Queridos hermanos y hermanas, el presente documento es un extenso estudio bíblico, el mismo que debido a su tamaño, necesita ser publicado en 3 partes; por ello le rogamos en Cristo Jesús, no se pierda de leer todas las partes a fin de que pueda entender y recibir el mensaje que Dios quiere entregar a Su pueblo en estas revelaciones. Y lógicamente, una vez que haya hecho la lectura completa, investigue, busque, escudriñe, a fin de que Dios le confirme o no acerca de la veracidad de la información aquí presentada.

He tratado de resumir en este estudio lo encontrado en la lectura e investigación de cientos de libros y documentos, lo que demandó así mismo, cientos de horas de trabajo. Si encuentra errores, por favor le ruego que los señale libremente con el fin de pulir este resumen. No es mi intención alarmar de ninguna manera con este estudio acerca de los sucesos que han ocurrido, están ocurriendo y ocurrirán en el mundo, sino de alertar al que quiera oír, desde luego. Siento que la voluntad de Dios es que yo comparta con todo aquel que quiera oír, lo que el Espíritu Santo me ha guiado a descubrir. Dicho esto, empezamos.

II. Los Verdaderos Manipuladores
Tristemente en los actuales días, la mayor parte de pastores, ministros, líderes y predicadores de la iglesia evangélica mundial no predican la verdad acerca de lo que está sucediendo en el mundo y de lo que está por suceder, a pesar de que lo conocen o lo han escuchado. No quiero arrogarme el papel de juez y juzgar esa actitud, sin embargo hay muchos otros ministros y rabinos, verdaderos siervos del Dios Altísimo como John Hagee, John McArthur, Chaim Kanievsky, Javier Palacios, Luis Palau, Salvador Freixedo, Víctor Tiburcio, Jonathan Cahn, etc., que ya están advirtiendo a la iglesia acerca de los acontecimientos que se avecinan y que creo que anteceden a los tiempos finales. El Señor Jesucristo señaló muy claramente la necesidad de que leamos y estudiemos la Biblia con el fin de conocer la verdad de Dios para así poder salir victoriosos en medio de lo terrible que se avecina.

El mundo actual no es el que parece o aparece en los medios de comunicación. Detrás de los presidentes, gobernadores, políticos, congresistas, militares, clero, organizaciones públicas y privadas, etc., y detrás de todos los problemas de corrupción, guerras, disputas, enfermedades, crisis económicas, plagas, desastres naturales, aberraciones sexuales, matanzas, etc., está un oscuro grupo de los hombres y mujeres que amasan más del 84% de la riqueza mundial (ONU, informe económico 2015). Este grupo puede ser considerado como una secta debido a sus prácticas escondidas de la luz pública. Y los que los investigan y denuncian les han dado nombres como los “Illuminatis”, “club de Bielderberg”, “Francmasones”, etc. Estos seres están por detrás de los presidentes y dirigentes más poderosos de la tierra y son lo que en realidad están marcando el destino de la humanidad desde los tiempos posteriores a Noé. Como adoradores del enemigo y embrutecidos por la codicia, ambición, avaricia y ansias de poder, están preparando el camino para el aparecimiento del anticristo, del falso profeta y de la gran bestia, ante lo cual, nosotros los redimidos por la sangre de Jesús exclamamos “Maranatha”.

Con sus estratagemas, han ido engañando y sometiendo poco a poco y desde el principio de la historia, a millones de seres humanos hacia el sufrimiento, la desesperación y por ende a prácticas espirituales separadas de la luz verdadera de YHWH, el Dios creador. Su misión principal es, a parte de cosechar almas para el infierno, preparar el camino para el surgimiento del enemigo de Dios. El libro de Éxodo ya los denuncia, seres humanoides gigantes resultantes de la unión anti-natura de ángeles caídos y humanas: los “Nefilim”, “Annunakis”, “Refaitas”, “Filisteos”, “Kházaros”, “Reptiloides”, etc., los mismos que han ido, no solo sobreviviendo sino reproduciéndose e injertándose en los diferentes estamentos de la política, la religión, la ciencia, en fin, en todo lo relacionado al quehacer humano.

III. Las Maquinaciones
Se puede afirmar con certeza que estos seres nunca dejaron a la creación de Dios vivir en paz, y atribuir con solvencia su participación activa en todas las tragedias que el AT y el NT relatan. Su actividad continúa mientras Jesús está en la tierra y son ellos los que promueven la condena del Mesías para llevarlo a la cruz, esperanzados en que podían matar al Hijo de Dios. Mas la gloriosa resurrección de Cristo, les propina la derrota final, su condenación a la muerte eterna. Jesús había establecido con Su sacrificio, un puente en el derrotero de los hombres, para que en lugar de caer por los despeñaderos de muerte, caminemos a través de Él hacia la vida eterna. Entonces entramos a los tiempos finales, a los tiempos de los juicios eternos, por lo que aquellos engendros reiniciaron con todo el odio posible su ofensiva terminal. Pero debido a los millones de hombres y mujeres retrasados, rebeldes, incrédulos y duros de corazón, Dios quiso extender Su gracia para darles a aquellos la oportunidad de arrepentirse. Por ello dichos juicios se han retrasado pero pueden venir en cualquier momento.

Una vez que Cristo Jesús asciende a los cielos cincuenta días después de Su resurrección, los ataques mortales a toda la humanidad se reinician con la persecución de los primeros cristianos y continúa con la fusión de parte de la iglesia primera y el politeísmo romano, lo cual da lugar al aparecimiento del “gran engendro”, “la gran ramera”, creada para robarle la gloria a Cristo en la imagen de la madre humana de Jesús. Esto hunde al mundo del primer milenio y medio, en un tiempo de oscuridad, pecado, desesperanza y muerte. Se producen las “cruzadas”, inmensas conspiraciones y asesinatos en el nombre de Dios; aparecen los primeros banqueros, “los judíos usureros negros de Venecia” del siglo 12; la “santa inquisición”, que fue el brazo armado de la religión anatema; el oscurantismo; el incesto y las depravaciones sexuales en las casas reales de Europa, auspiciadas, socapadas y alcahueteadas por los papas, en el nombre de Dios; las plagas, la pobreza generalizada y la muerte por doquier. Aquellos estaban consiguiendo su plan. (Continúa mañana la parte 2).
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