MENSAJE PARA HOY:
<< La incidencia cada vez mas alta del cáncer en todas sus
manifestaciones en la vida de los humanos es cada día mas devastadora.
No importa la raza, el sexo, la situación económica, la creencia
religiosa, el nivel académico, la profesión, etc., esta terrible enfermedad
ataca por igual a todos hasta llevar al humano a la muerte. Y lo impensado está
ya ocurriendo: el cáncer está también atacando a los animales.
Hasta hace unos pocos
años atrás, los científicos conocían los procesos de gestación, crecimiento,
metamorfosis y metástasis de las células cancerígenas, pero
no podían explicar las razones de su aparecimiento en el cuerpo de
los humanos. Hoy en día, miembros de la American Cancer Society lo manifiestan
abiertamente: el cáncer se produce como resultado de la acción que los jugos
gástricos que se han tornado amargos, tienen sobre los diferentes órganos
y tejidos.
Lo impactante del
asunto es que el cuerpo secreta aquellos jugos cuando la persona sufre por
extendidos periodos de tiempo por las acciones negativas de otros que lo
perjudicaron o lo hicieron sufrir. Es decir, se guardó para si aquellas
situaciones en lugar de dejarlas ir, en lugar de perdonar.
El Señor le dijo al
enemigo, cuando éste le pidió autorización para atacar a Job: "Puedes
tocar toda su vida y todo su cuerpo, excepto su corazón" En otras
palabras, Dios se reservó el corazón humano para habitar en Él, la prueba es
que hay diferentes tipos de cáncer que atacan a todos los órganos, tejidos,
huesos, músculos, excepto el corazón, nadie ha sufrido, ni sufre, ni sufrirá de
cáncer al corazón.
El resentimiento y la
amargura y los posteriores desbalances químicos se producen en el estómago,
mientras que el amor, la esperanza y el perdón nacen en el corazón. Cuando se
deja que el cuerpo se llene de amargura, rencor y odio, muy probablemente el cáncer
aparecerá en algún momento; ese es el motivo de este mensaje: si
tienes cosas que perdonar y las ha guardado por algún tiempo, es hora
de perdonar, ya, hoy.
Deja que el Señor
entre en tu corazón y limpie toda la maleza de recuerdos amargos y dolorosos
que has dejado que crezca sin razón ni motivo. Cuando declaras el perdón para
los que te ofendieron o para ti mismo, declaras sanidad y vida en tu cuerpo, y
el Señor te añadirá años de paz y gozo. (cfjg)
DIOS te bendiga.