📖🖊 Devocional para hoy, Martes 22 Febrero, 2022
“Advertencia Final para el Pueblo de Dios”
Por: Dr. César F. Jara
Fecha Profética:
2/22/2022, 22 de Febrero, 2022
2do Pacto, libro 22, capítulo 2, versículo 22
2+22 +2+22= 12 = 3, Número de la Trinidad de Dios
El que tenga oídos, que oiga, y el que ha pecado, que se arrepienta.
«Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno.» (2 Pedro 2:22)
PRIMERA LLAMADA FINAL
Cuando en los aeropuertos esperamos abordar un vuelo, los agentes hacen en los cinco minutos previos a la salida del avión, tres últimos llamados a los pasajeros para advertirles que deben abordar lo más pronto posible, pues el avión saldrá en breve. Y aunque la hora está escrita clara y en negrillas en el ticket, y aún los letreros digitales luminosos lo anuncian, varios de los pasajeros estarán todavía en los baños, comprando comida, leyendo o viendo las noticias, o buscando a un familiar, o peor aún, a la entrada o en la carretera de acceso al aeropuerto. Para cubrir todo eso, se han establecido legalmente estos tres últimos llamados. Después que se anuncia el tercero, los que entraron se van, y los que no abordaron porque, o no oyeron o no llegaron, se quedarán, y no habrá fuerza humana que haga que la aerolínea reabra las puertas una vez que éstas se han cerrado, no importa si el pasajero pagó asientos de primera clase. Es que el vuelo debe salir a la hora establecida, ni un segundo antes, ni un segundo después.
Esta fecha que luce tan especial y rara, y que nunca más la volveremos a ver, fue diseñada por DIOS. Y en esta fecha, el Señor ha hablado a través de Su Espíritu Santo a todos Sus hijos alrededor del mundo, a unos, directamente y a otros, a través de sus hermanos. Y ha entregado Su mensaje claro y contundente, como si fuera el último llamado:
Ciertamente que es una terrible profecía, advertencia, anuncio, o quizá, el último llamado a los que quieren irse con Jesucristo. El que tenga oídos, que oiga y se arrepienta de sus malos caminos.
SEGUNDA LLAMADA FINAL
2do Pacto, libro 22, capítulo 2, versículo 22
2+22 +2+22= 12 = 3, Número de la Trinidad de Dios
El que tenga oídos, que oiga, y el que ha pecado, que se arrepienta.
«Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: El perro vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno.» (2 Pedro 2:22)
PRIMERA LLAMADA FINAL
Cuando en los aeropuertos esperamos abordar un vuelo, los agentes hacen en los cinco minutos previos a la salida del avión, tres últimos llamados a los pasajeros para advertirles que deben abordar lo más pronto posible, pues el avión saldrá en breve. Y aunque la hora está escrita clara y en negrillas en el ticket, y aún los letreros digitales luminosos lo anuncian, varios de los pasajeros estarán todavía en los baños, comprando comida, leyendo o viendo las noticias, o buscando a un familiar, o peor aún, a la entrada o en la carretera de acceso al aeropuerto. Para cubrir todo eso, se han establecido legalmente estos tres últimos llamados. Después que se anuncia el tercero, los que entraron se van, y los que no abordaron porque, o no oyeron o no llegaron, se quedarán, y no habrá fuerza humana que haga que la aerolínea reabra las puertas una vez que éstas se han cerrado, no importa si el pasajero pagó asientos de primera clase. Es que el vuelo debe salir a la hora establecida, ni un segundo antes, ni un segundo después.
Esta fecha que luce tan especial y rara, y que nunca más la volveremos a ver, fue diseñada por DIOS. Y en esta fecha, el Señor ha hablado a través de Su Espíritu Santo a todos Sus hijos alrededor del mundo, a unos, directamente y a otros, a través de sus hermanos. Y ha entregado Su mensaje claro y contundente, como si fuera el último llamado:
«El tiempo se ha acabado; las trompetas ya están sonando, arrepiéntete de tus malos caminos y vuélvete a tu Creador, para que seas levantado en el arrebatamiento que está por pasar. Si te quedas, te arrepentirás hasta de haber nacido; porque tus ojos verán cosas que te harán desfallecer de terror; y tus carnes se desintegrarán de tal forma que llegues a ver tus propias entrañas; y sentirás como si tu corazón explotara en mil pedazos; y tu alma enloquecerá tratando de negar que eres tú a los terribles demonios que te acosarán y desgarrarán tu vida en cada mordida. Pero no morirás, porque la muerte ha sido quitada de la tierra por el tiempo del gran sufrimiento y castigo, hasta que seas llevado ante el Gran Trono del Juicio del Fin, donde el Creador declarará tu sentencia eterna…»
Ciertamente que es una terrible profecía, advertencia, anuncio, o quizá, el último llamado a los que quieren irse con Jesucristo. El que tenga oídos, que oiga y se arrepienta de sus malos caminos.
SEGUNDA LLAMADA FINAL
Exégesis de 2 Pedro 2
Ofrecemos a continuación la palabra profética que el Espíritu Santo del Dios Altísimo nos reveló en la exégesis del texto bíblico localizado en el segundo Pacto, libro 2 del apóstol Pedro, capítulo 2, y versículo 22:
Advertencia para los falsos profetas, falsos maestros y falsas doctrinas que niegan a Jesûs, y sobre el fin que les espera a estos hacedores de maldad:
2 Pedro 2:1 Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.
Advertencia para los que escuchen, adoren y obedezcan a esos falsos profetas y maestros y la condenación que les espera:
2 Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será blasfemado,
3 y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se duerme.
Porque Dios es amor, pero también fuego consumidor, que quema y destruye el pecado y a los hacedores de maldad:
4 Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser reservados al juicio;
5 y si no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos;
6 y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que habían de vivir impíamente,
7 y libró al justo Lot, abrumado por la nefanda conducta de los malvados
8 (porque este justo, que moraba entre ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos inicuos de ellos),
9 sabe el Señor librar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio;
10 y mayormente a aquellos que, siguiendo la carne, andan en concupiscencia e inmundicia, y desprecian el señorío.
Porque Dios castigará con la muerte eterna más violenta a los blasfemos que insulten Su santo nombre y a los que pequen con premeditación y alevosía:
Atrevidos y contumaces, no temen decir mal de las potestades superiores,
11 mientras que los ángeles, que son mayores en fuerza y en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas delante del Señor.
12 Pero éstos, hablando mal de cosas que no entienden, como animales irracionales, nacidos para presa y destrucción, perecerán en su propia perdición,
El castigo terrible será también para aquellos que se solacen en la lujuria y su depravación sexual:
13 recibiendo el galardón de su injusticia, ya que tienen por delicia el gozar de deleites cada día. Estos son inmundicias y manchas, quienes aún mientras comen con vosotros, se recrean en sus errores.
14 Tienen los ojos llenos de adulterio, no se sacian de pecar, seducen a las almas inconstantes, tienen el corazón habituado a la codicia, y son hijos de maldición.
A los que han falseado la naturaleza del Espíritu Santo y juegan a ser profetas, apóstoles y maestros predicando doctrinas anatemas:
15 Han dejado el camino recto, y se han extraviado siguiendo el camino de Balaam hijo de Beor, el cual amó el premio de la maldad,
16 y fue reprendido por su iniquidad; pues una muda bestia de carga, hablando con voz de hombre, refrenó la locura del profeta.
17 Estos son fuentes sin agua, y nubes empujadas por la tormenta; para los cuales la más densa oscuridad está reservada para siempre.
18 Pues hablando palabras infladas y vanas, seducen con concupiscencias de la carne y disoluciones a los que verdaderamente habían huido de los que viven en error.
19 Les prometen libertad, y son ellos mismos esclavos de corrupción. Porque el que es vencido por alguno es hecho esclavo del que lo venció.
Advertencia sobre la terrible concupiscencia de muchos que dicen ser de Cristo pero que han vuelto a la vida de pecado, y que por ello serán dejados en el Rapto de la iglesia:
20 Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos, su postrer estado viene a ser peor que el primero.
21 Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado.
22 Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: «El perro vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno.»
TERCERA Y ÚLTIMA LLAMADA FINAL
Hermanos, tanto todos los números que conocemos como los que no conocemos, así como el tiempo, los milenios, las centurias, las décadas, los lustros, los años, los meses, los días, las horas, los minutos y los segundos fueron creados por Dios para ordenar Su creación, pero también para hablarnos y dejarnos saber Su voluntad para toda la humanidad, para aquellos que creemos en Êl, pero también para aquellos que niegan Su existencia infinita y sacro santa.
Porque Dios ama a toda Su creación; Êl escucha y habita alrededor de los que le temen, pero para aquellos que viven vidas rebeldes de pecado y perdición, el Señor de la justicia les ha advertido que dejará caer todo Su juicio santo sobre aquellos que lo rechazaron, pero también sobre aquellos que conociendo el camino y habiendo visto y conocido al Hijo del Hombre, por un tiempo le sirvieron pero luego volvieron a las sendas de oscuridad, a revolcarse en sus propios vómitos y porquerías, por causa de sus pecados y transgresiones.
Te pregunto amado hermano, amigo, amada hermana, amiga:
Si entre tus respuestas hay un “NO” a cualquiera de las preguntas, tengo que decirte con mucha pena, que, si no rectificas y corres al encuentro con Jesûs, perderás el vuelo, irremediablemente.
El Señor te bendiga.
Μαρανάθα, Ιησούς έρχεται σύντομα
Maranatha, Jesús viene pronto
Ofrecemos a continuación la palabra profética que el Espíritu Santo del Dios Altísimo nos reveló en la exégesis del texto bíblico localizado en el segundo Pacto, libro 2 del apóstol Pedro, capítulo 2, y versículo 22:
Advertencia para los falsos profetas, falsos maestros y falsas doctrinas que niegan a Jesûs, y sobre el fin que les espera a estos hacedores de maldad:
2 Pedro 2:1 Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.
Advertencia para los que escuchen, adoren y obedezcan a esos falsos profetas y maestros y la condenación que les espera:
2 Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será blasfemado,
3 y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se duerme.
Porque Dios es amor, pero también fuego consumidor, que quema y destruye el pecado y a los hacedores de maldad:
4 Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser reservados al juicio;
5 y si no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos;
6 y si condenó por destrucción a las ciudades de Sodoma y de Gomorra, reduciéndolas a ceniza y poniéndolas de ejemplo a los que habían de vivir impíamente,
7 y libró al justo Lot, abrumado por la nefanda conducta de los malvados
8 (porque este justo, que moraba entre ellos, afligía cada día su alma justa, viendo y oyendo los hechos inicuos de ellos),
9 sabe el Señor librar de tentación a los piadosos, y reservar a los injustos para ser castigados en el día del juicio;
10 y mayormente a aquellos que, siguiendo la carne, andan en concupiscencia e inmundicia, y desprecian el señorío.
Porque Dios castigará con la muerte eterna más violenta a los blasfemos que insulten Su santo nombre y a los que pequen con premeditación y alevosía:
Atrevidos y contumaces, no temen decir mal de las potestades superiores,
11 mientras que los ángeles, que son mayores en fuerza y en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas delante del Señor.
12 Pero éstos, hablando mal de cosas que no entienden, como animales irracionales, nacidos para presa y destrucción, perecerán en su propia perdición,
El castigo terrible será también para aquellos que se solacen en la lujuria y su depravación sexual:
13 recibiendo el galardón de su injusticia, ya que tienen por delicia el gozar de deleites cada día. Estos son inmundicias y manchas, quienes aún mientras comen con vosotros, se recrean en sus errores.
14 Tienen los ojos llenos de adulterio, no se sacian de pecar, seducen a las almas inconstantes, tienen el corazón habituado a la codicia, y son hijos de maldición.
A los que han falseado la naturaleza del Espíritu Santo y juegan a ser profetas, apóstoles y maestros predicando doctrinas anatemas:
15 Han dejado el camino recto, y se han extraviado siguiendo el camino de Balaam hijo de Beor, el cual amó el premio de la maldad,
16 y fue reprendido por su iniquidad; pues una muda bestia de carga, hablando con voz de hombre, refrenó la locura del profeta.
17 Estos son fuentes sin agua, y nubes empujadas por la tormenta; para los cuales la más densa oscuridad está reservada para siempre.
18 Pues hablando palabras infladas y vanas, seducen con concupiscencias de la carne y disoluciones a los que verdaderamente habían huido de los que viven en error.
19 Les prometen libertad, y son ellos mismos esclavos de corrupción. Porque el que es vencido por alguno es hecho esclavo del que lo venció.
Advertencia sobre la terrible concupiscencia de muchos que dicen ser de Cristo pero que han vuelto a la vida de pecado, y que por ello serán dejados en el Rapto de la iglesia:
20 Ciertamente, si habiéndose ellos escapado de las contaminaciones del mundo, por el conocimiento del Señor y Salvador Jesucristo, enredándose otra vez en ellas son vencidos, su postrer estado viene a ser peor que el primero.
21 Porque mejor les hubiera sido no haber conocido el camino de la justicia, que después de haberlo conocido, volverse atrás del santo mandamiento que les fue dado.
22 Pero les ha acontecido lo del verdadero proverbio: «El perro vuelve a su vómito, y la puerca lavada a revolcarse en el cieno.»
Hermanos, tanto todos los números que conocemos como los que no conocemos, así como el tiempo, los milenios, las centurias, las décadas, los lustros, los años, los meses, los días, las horas, los minutos y los segundos fueron creados por Dios para ordenar Su creación, pero también para hablarnos y dejarnos saber Su voluntad para toda la humanidad, para aquellos que creemos en Êl, pero también para aquellos que niegan Su existencia infinita y sacro santa.
Porque Dios ama a toda Su creación; Êl escucha y habita alrededor de los que le temen, pero para aquellos que viven vidas rebeldes de pecado y perdición, el Señor de la justicia les ha advertido que dejará caer todo Su juicio santo sobre aquellos que lo rechazaron, pero también sobre aquellos que conociendo el camino y habiendo visto y conocido al Hijo del Hombre, por un tiempo le sirvieron pero luego volvieron a las sendas de oscuridad, a revolcarse en sus propios vómitos y porquerías, por causa de sus pecados y transgresiones.
Pablo nos dice en su carta a los Efesios capítulo 2:22 «Por Êl, también vosotros los gentiles sois hechos parte de esta morada donde Dios vive por su Espíritu.» (Ephesians 2:22 NLT traducido)
Ya el Señor nos dio a Su Hijo Jesûs, la Puerta de entrada a la vida eterna. Por nuestra parte, debemos guardar nuestra santidad, arrepintiéndonos constantemente para que el Espíritu Santo nos limpie de todo pecado y de toda transgresión, y nos haga blancos como la nieve, para poder ser levantados en los aires por los ejércitos de ángeles del Invencible de los invencibles, y que en ese viaje, el Santo de los santos nos dé un nuevo cuerpo espiritual, eterno y perfecto, para poder vestir las vestiduras celestiales de lino fino y así podamos entrar y estar presentes en la gran Boda del Cordero Santo con Su iglesia, nosotros, los redimidos por Su Santa Sangre Bendita.
Te pregunto amado hermano, amigo, amada hermana, amiga:
¿Ya le entregaste tu vida a Jesûs?¿Ya tienes al Espíritu Santo viviendo dentro de ti?¿Guardas tu santidad cada día?¿Crees en la Biblia y en el Rapto que la Palabra de Dios anuncia?¿Crees que estamos en los tiempos finales?¿Crees que el Rapto puede ser esta noche?¿Estás listo para irte con Jesucristo?
ORACIÓN
«Padre Santo, bendito seas por los siglos de los siglos, exaltamos Tu Nombre ahora y para siempre. Gracias por la vida y las bendiciones abundantes que derramas cada mañana sobre aquellos que te buscan, pero también sobre aquellos que te rechazan. Gracias por Tus profecías y revelaciones que son advertencias para que rectifiquemos nuestro camino y volvamos a la senda antigua, a la senda de Tu justicia, a vivir para Tí y por Tí, a la senda del primer amor. Reenciende Padre Todopoderoso en todos Tus hijos, esa llama del amor puro y perpetuo para que te obedezcamos y rindamos todo nuestro ser delante de Tí en cada mañana, te lo pido en el santo y portentoso nombre de Tu Hijo amado, Yeshûa HaMashiaj, amén y amén.»
El Señor te bendiga.
Μαρανάθα, Ιησούς έρχεται σύντομα
Maranatha, Jesús viene pronto
No hay comentarios.:
Publicar un comentario