Jesucristo es la Sana Doctrina

Devocional para hoy,
Miércoles 30 de Mayo, 2018.

“Jesucristo es la Sana Doctrina”
Por: CF Jara

Leer: Juan 17
«Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.» (Juan 14:6)

El ecumenismo es el término que define a la meta del jefe de la iglesia católica -el papa- para unificar todas las religiones existentes, lo cual es parte del macabro plan Illuminati de instaurar un solo gobierno y una sola moneda sobre la faz de la tierra, pero que también está anunciado en el libro de las Revelaciones o Evangelio de Jesucristo, el Apocalipsis. Y el problema de esta acción que parecería ser llena de buenas intenciones, es que la doctrina que imperaría sobre todas las demás, es la católica. Pero ¿qué hay de malo con ello? Todo, esa es la respuesta, pues si bien el catolicismo menciona a Dios Padre, a Jesucristo y al Espíritu Santo en todos los libros que rigen la liturgia, el catecismo y las declaraciones de fe, sin embargo, el centro de la adoración en el catolicismo es María, la madre de Jesús, en un sinnúmero de advocaciones (presentaciones) y los miles de “santos” y “beatos”. Si una doctrina de cualquier iglesia no reconoce la supereminente figura de Jesucristo como el centro de todo y por encima de todo, entonces esa doctrina es simplemente, anatema. Para efectos del mensaje de hoy se ha escogido solo siete doctrinas apóstatas de entre cientos, que la iglesia católica enseña a sus fieles:

1. Declara que María es la “madre de Dios”, cuando YHWH es el origen de Él mismo y de todo y es el Todopoderoso “Yo Soy”, Dios de toda la creación. Decir que María es la madre de Dios, la pone por encima del Sempiterno, lo cual es anatema. María, según la Biblia, es la madre de Jesús, y nada ni nadie está por encima de YHWH.

2. Declara que el papa tiene la autoridad de Cristo en la tierra, y se hace llamar el “vicario” del Señor, es decir, que sustituye a la autoridad de Cristo sobre la iglesia. La Biblia no reporta en ninguna parte algún momento donde Jesús haya cedido Su autoridad al papa, primero porque los papas aparecen 400 años después de la ascensión de Jesucristo a los cielos, y segundo, porque bien claro lo dice la Biblia, el Señor Jesucristo dejó al Espíritu Santo en Su reemplazo.


3. Declara que la iglesia católica como organización corporativa, es santa y está por encima de todos los creyentes. Sin embargo, la Biblia dice que la iglesia somos todos y cada uno de los creyentes y no la corporación como tal. Y los “santos” son los creyentes que se han apartado del mundo para servir al Señor, no la organización.

4. Llama ‘santo’ al papa, un ser humano como todos, con sus fortalezas y debilidades, con sus triunfos, sus caídas y sus tentaciones, de las cuales solo DIOS sabe cuándo, dónde y cuántas veces cayeron todos y cada uno de los papas, cardenales, sacerdotes, seres humanos, de la religión que sea. Santo solo es el Señor Jesucristo, el Santo de los santos, Sus redimidos.

5. Declara que, en la liturgia eclesial, las encíclicas, los estudios y los enunciados papales están por encima de lo que dice la Biblia. Sin embargo, todo ese material esta basado en la Biblia, a la que le quitan y le añaden de acuerdo a sus conveniencias y necesidades, lo cual es apostasía, según Apocalipsis 22:21.

6. Promueve la idolatría a través de autorizar la adoración a miles de fotos, pinturas, esculturas, muñecos de barro, arcilla, yeso, metal, etc., etc., de personajes bíblicos, así como de hombres y mujeres que, a lo largo de los dos milenios de nuestra era, tuvieron vidas de amor sincero a Dios, pero cuya memoria ha sido mal usada por el papado para atrapar la feligresía de millones de hombres y mujeres alrededor del mundo entero, a través de su devoción a ídolos.

7. Los millones de dólares que reciben como limosnas, ofrendas, penitencias, donaciones, etc., provienen de los millones de creyentes católicos del mundo a través de las cientos de miles de iglesias alrededor de todo el mundo. Sin embargo, con este dinero han fundado el banco del Vaticano, el más grande y poderoso en la tierra, según muchos expertos, a través del cual mantienen inversiones gigantescas que les dan ganancias gigantescas que NADIE sabe a donde van, en lugar de ayudar a los millones de seres humanos que mueren de hambre cada día, aún en las mismas locaciones circundantes a sus iglesias.

Hermanos, una cosa es la tolerancia, la comprensión, la convivencia en paz con el catolicismo y con las otras religiones; pero otra cosa es que no hagamos nada por sacar de la oscuridad a tantos amigos, familiares, vecinos, conocidos y desconocidos que practican esta fe. La Biblia dice que la verdad nos hará libres, y la verdad, el camino y la vida es solo Jesucristo, el Cordero Santo, el Todopoderoso Hijo de Dios que murió en la cruz para darnos el perdón a nuestros pecados, y resucitó al tercer día, venciendo a la muerte y al mal para siempre; que vendrá bien pronto a levantar a Su iglesia, aquellos que lo recibieron en su corazón y se han mantenido viviendo una vida santa, cubiertos por el amor y la gracia de Eterno Padre celestial, nuestro Abba Padre.

Oración
«Señor mi Dios, la tierra está dando gemidos de parto, porque la corrupción y depravación se han desperdigado por doquier. La gente ante las señales busca las religiones, sectas, filosofías, doctrinas, etc., porque cree que ahí encontraré paz y refugio. Sin embargo, ninguna de esas religiones pueda dar al hombre lo que Jesús da. Creer, amar y seguir a Jesucristo no es una religión, sino una relación de amor y confianza entre los hombres y el Hijo de Dios, Aquel que se entregó para morir por toda la humanidad en la cruz, dos mil años atrás. Fuera de Êl no hay nada, no hay nadie, ni ejércitos, ni armas nucleares, ni gobiernos, ni políticos, ni hombres ricos, ni demonios, ni riquezas, ni industria, ni fármacos, ni drogas, ni depravaciones, ni hechicerías, ni conjuros, ni estatuas, ni ídolos, ni santos, ni talismanes, ni animales, ni ninguna cosa creada que se pueda ver o que no se pueda, ver; que se mueva o que no se mueva; NADA. Jesucristo es la doctrina verdadera; Êl es el camino, la verdad y la vida. Que nunca se nos olvide esta verdad de nuestro corazón, Padre amado, y que podamos compartirlo con todos aquellos que todavía no te conocen o dudan, te lo ruego en el Todopoderoso nombre de Tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén.»

התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 2 Crónicas 10 - 12; Juan 11:30-57
Descargue el devocional en PDF: Jesucristo es la sana doctrina

Unidos en Cristo

Devocional para hoy,
Lunes 28 de Mayo, 2018.

“Unidos en Cristo"
Por: CF Jara

Leer: Efesios 4
«...Mirad cuán bueno y cuán agradable es que los hermanos habiten juntos en armonía.» (Salmo 133:1)

Cuando nos encontramos con las listas de nombres en la Biblia, tal vez nos vemos tentados a pasarlas por alto. Sin embargo, allí podemos encontrar algunos tesoros, como en la lista de los doce apóstoles a quienes Jesús llamó para que sirvieran en Su nombre. Muchos son conocidos: Simón, a quien Jesús llamó Pedro; Jacobo y Juan, que eran hermanos y pescadores; Judas Iscariote, el traidor. Pero es probable que no tengamos en cuenta que Mateo, el publicano, y Simón, el zelote, quizá fueron enemigos anteriormente.

Mateo, aunque era judío, cobraba impuestos a sus compatriotas para Roma; por lo tanto, los demás judíos consideraban que colaboraba con el enemigo. Los recaudadores de impuestos eran despreciados por ser corruptos y por exigir que el pueblo judío diera dinero a otra autoridad aparte de Dios. Por otra parte, antes del llamado de Jesús, Simón, el zelote, era miembro de un grupo de judíos nacionalistas que odiaban a Roma y buscaban destruir su poder. Los zelotes eran lo que en los tiempos actuales llamamos “guerrilleros”. Aunque Mateo y Simón tenían convicciones políticas diferentes, los Evangelios no documentan que discutieran o pelearan. El Señor tenía un claro mensaje al haber escogido a quienes fundarían Su iglesia de lo mas diverso de la población, incluyendo a Judas Iscariote, para dejarnos saber también que, en Su iglesia, incluyendo los tiempos actuales, habrían “cristianos” que traicionarían a sus hermanos.

La enseñanza del Señor es que debemos amar también a aquellos que son, piensan y/o actúan diferente a nosotros, sean o no cristianos, de la misma denominación o de otra. El hecho de haber sido salvados por Jesús nos debe de hacer capaces de entender la multiforme, multidimensional, multifacética y multicolorida obra del Creador, en todas sus dimensiones, formas, diseños, colores y tamaños y estructuras imaginables e inimaginables; sea en lo alto, en lo bajo, en lo ancho y en lo profundo de Su creación.

Así mismo son los multiformes modelos de hombres y mujeres que habitan sobre la tierra y que fueron creados por Dios, a Su gusto e imagen. Todos y cada uno de nosotros, los seres vivientes somos únicos, caminamos, hablamos, hacemos, pensamos y oramos de una manera única, por la gracia y la voluntad del Creador. Y si a Êl le place esa forma, entonces debe estar bien para todos.

De ahí que hacer exclamaciones nacionalistas exacerbadas e idólatras por el país de dónde venimos o asumir posiciones políticas y defenderlas más que a la misma Palabra, contradice lo que sucedió entre aquellos que fueron llamados por el Señor Jesús. Pedro y Mateo nunca se engarzaron en ninguna disputa de tipo nacionalista o peor política. Los que hemos sido redimidos por la sangre del Cordero, fuimos dados una nueva identidad. En Êl tenemos una nueva historia, nueva nacionalidad, nueva bandera y un nuevo lenguaje.

Cuando fijamos nuestros ojos en Cristo, podemos desarrollar unidad con los demás seres humanos mediante los lazos del Espíritu Santo. Nuestra mayor lealtad debe ser a Cristo, quien dio Su vida para que podamos coexistir en unidad unos con otros y con toda la creación. La gloria es de Cristo Jesús, por siempre y para siempre. Que la creación alabe el santo nombre del Eterno, amén.

Oración
«Señor mi Dios, Dios Trino, Excelso Dios, Tú existes en perfecta armonía: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Que tu Espíritu Santo nos enseñe a coexistir de la misma manera con nuestros semejantes y con tu inmensa creación. Que el color de nuestra piel, de nuestros cabellos u ojos, o la nacionalidad humana, o los bienes económicos no nos separen de los otros, peor aún la fe que cada quien profesa. Que los gustos por la música, la literatura, el arte, la danza -que existen porque Tú mismo lo permitiste- sean elementos de unión, de gozo, de respeto, de convivencia plena unos con otros. Que nos acordemos siempre que la forma más poderosa de predicar es cómo actuamos y lo qué hacemos, más que lo que decimos. Ven Señor y vive en mí, habita en nosotros Tu pueblo, para que nuestros testimonios sean suficientes para traer a las almas a Tus pies, en el Todopoderoso nombre de Tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén.»


התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 2 Crónicas 4 - 6; Juan 10:24-42

Descargue el devocional en PDF: Unidos en Cristo

En paz me dormiré

Devocional para Hoy,
Viernes 25 de Mayo, 2018.

“En paz me dormiré”
Por: Poh Fang Chia
Edición: CF Jara

Leer: Salmo 4
«En paz me acostaré, y asimismo dormiré; porque solo tú, Señor, me haces vivir confiado.» (Salmo 4:8)

Sin duda, el rey David estaba angustiado cuando escribió el Salmo 4. Algunos de sus enemigos estaban arruinando su reputación con acusaciones infundadas (v. 2), y otros cuestionaban su capacidad para gobernar (v. 6). Probablemente David estaba enojado y frustrado ante tanto trato tan injusto. Sin embargo, lo que David escribe em este salmo son palabras asombrosas considerando la dura situación en la que se encontraba: «En paz me acostaré, y asimismo dormiré» (v. 8).

Charles Spurgeon, uno de los predicadores insignes del siglo 19, explica maravillosamente el versículo 8: “En este acostarse, David se entregó en las manos de otro; y lo hizo de tal manera que, sin ninguna preocupación, se quedó dormido. Aquí se ve una confianza perfecta”. Pero, ¿qué inspiró esa confianza? David siempre confió en el Señor desde sus cortas edades. Por ello el mismo Creador lo exaltó sobre los hombres al decir que el rey tenía un corazón conforme al corazón de YHWH. David confiaba en todo tiempo que Dios respondería sus oraciones (v. 3). Además, como estaba seguro de que Dios había escogido amarlo, supliría sus necesidades con amor.

Y a ti, hermano, hermana, ¿qué te mantiene despierto durante la noche? La frase siguiente puede sonar conocida para algunos: “últimamente no puedo dormir; doy vueltas en la cama, tratando de encontrar una solución a algún asunto. Y luego de un tiempo, ¡empiezo a preocuparme, ya que temo no descansar lo suficiente para enfrentar los desafíos del nuevo día” ¿Te suena familiar? ¿estas enfrentando problemas relacionales, de salud, de trabajo, un futuro incierto?

En primer lugar, debes recordar antes de nada que, sea lo que sea el problema que enfrentas, todos enfrentamos situaciones complicadas y debido a ello, todos nos preocupamos en algún momento. Pero Jesús sabía de esto al advertirnos que mientras vivamos en este mundo tendremos aflicciones, unos mas otros menos; unos, aflicciones de un tipo; otros, problemas de otro tipo, pero el Señor nos dijo: «Tranquilo, confía en Mí; Yo tengo el control de tu vida; todo tiene un propósito; Mis planes son mejores que los tuyos; todo sucede por una razón que siempre va a ser para tu bien; Yo te sostendré; Yo te proveeré; Yo te defenderé; Yo cuidaré de ti; Yo enviaré a Mis ángeles para que acampen alrededor tuyo y de los tuyos; tranquilo, todo va a estar bien, solo confía; acuéstate en paz y duérmete en paz, porque mañana verás la gloria de mi Nombre.»

Si usted cree en un Dios como éste, que dice promesas como éstas, pero por sobre todo, que siempre las cumple, ¿será posible entonces que cada noche asiente su cabeza sobre su almohada, cierre sus ojos y diga como el rey David: «en paz me acostaré y así mismo dormiré porque solo Tú Señor me haces vivir confiado.»?
Alabado sea el nombre del Eterno, por siempre y para siempre.

Oración
«Señor mi Dios, te pido que me ayudes a descansar y a confiar en Tu poder y Tu presencia cuando la preocupación amenaza con robarme la paz y el sueño. Señor, te entrego a esta hora mis dudas, preocupaciones y todas las cosas que están pendientes por resolverse. Descanso en Tu poder y Tu compañía, y te confío mi vida, mis sueños, mi familia, mis necesidades. Yo sé que Tú me amas con un amor inmensurable y que siempre quieres lo mejor para mí. Confío en Ti, en el poder de Tu nombre. Cierro mis ojos y declaro que en paz me acuesto y en paz voy a dormir, porque solo Tú Señor, llenas mi vida y mi alma de confianza, oro en el Todopoderoso nombre de Tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén.»

התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 1 Crónicas 22 - 24; Juan 8:28-59

Descargue el devocional en PDF: En paz me dormiré

Jesucristo tu salvador

Devocional para hoy,
Lunes 21 de Mayo, 2018.

“Jesucristo tu salvador”
Por: CF Jara

Leer: Daniel 3:1-30
«He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará. Y si no, sepas, oh rey, que no serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado. …» (Daniel 3:17-18)

Corría el año 605 antes del nacimiento de Jesús, cuando el pueblo israelita sufría de su segundo cautiverio en Babilonia, léase “castigo”, por causa de haberse alejado de los edictos de YHWH. Ellos habían caído en idolatría y desobediencia. Y entre el pueblo cautivo estaban cuatro jóvenes, llamados Ananías, Misael, Azarías y Daniel, de los cuales se dice que pertenecían a una familia real o noble de Judá (Daniel 1:3-4). Debido a que estos jóvenes eran muy inteligentes, fueron reclutados por Aspenaz, el principal oficial de la corte del rey para un programa de tres años que incluía el aprendizaje del lenguaje y la literatura de los babilonios. En el capítulo 2 del libro de Daniel podemos leer que luego de la revelación del significado del sueño con el gigante al rey de Babilonia, Nabucodonosor, Daniel fue nombrado consejero real mientras que, a los otros tres muchachos, se les envió a otra provincia como encargados de los negocios del rey. Los nombres hebreos que habían recibido en el momento de la circuncisión y que estaban relacionados con Dios, les fueron cambiados con nombres relacionados a la idolatría caldea. Así, Daniel (Dios es mi juez) se cambió por Beltsasar, que significa ‘el guardián de los tesoros ocultos de Bel’; Ananías (la gracia del Señor) por Sadrac, ‘la inspiración del sol’, al que los caldeos adoraban; Misael (el Dios fuerte), por Mesac, de la diosa ‘Sac’, nombre bajo el cual Venus era adorada; y Azarías (el Señor me ayuda), por Abed-Nego, el ‘siervo del fuego iluminado’, que ellos también adoraban. El objetivo de aquel entrenamiento y el cambio de nombres era hacer que se olvidaran del Dios de sus padres, la guía de su juventud. Pero ninguno de los cuatro se olvidó de YHWH, y el Señor los libró de una muerte terrible.

El rey Nabucodonosor había terminado de construir la imponente estatua de uno de sus dioses, de 30 metros de alto y 6 de ancho, cuya cabeza era completamente de oro, los brazos de plata, el vientre y muslos de bronce, las piernas de hierro y los pies de hierro y barro. Y expidió un decreto mediante el cual todos los habitantes del reino, incluidos la corte real y cortesanos, sacerdotes, políticos, militares y todo el pueblo civil en general, debían acudir ante dicho ídolo para postrarse ante él. Todos lo hicieron así, excepto los tres jóvenes de la historia, quienes se negaron a humillarse ante aquel ídolo. Entonces unos cortesanos, envidiosos de la sabiduría de aquellos muchachos y del favor que el rey tenía con ellos, los reportaron al rey. Éste los mandó a llamar y cuando estuvieron ante él, les ordenó que se postraran, pero ellos, parados delante del temible rey de la tierra, declararon valientemente que, bajo ninguna circunstancia, adorarían la gigante imagen que se elevaba frente a ellos. Juntos, afirmaron: «He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará. Y si no, sepas, oh rey, que no serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado.» (Daniel 3:17-18 RV 1995).

Entonces Nabucodonosor, con gran ira ordenó que los arrojasen en un horno ardiente, tan fuerte, que sus llamas alcanzaron y mataron a los guardias que habían atado y arrojado a los muchachos dentro. El furioso rey miraba hacia el horno cuando de pronto vio con mucho asombro, las figuras no de tres sino de cuatro personas, los tres muchachos y lo que Nabucodonosor identificó como “el hijo de los dioses”. Entones se acercó al horno y llamó a los jóvenes que salieran de allí. Ellos salieron, completamente sanos, sin un solo cabello quemado, ni su ropa con olor a quemado (vv. 19-27), lo cual sorprendió de gran manera a todos los presentes, incluido el rey, quien alabó al Dios verdadero e hizo una confesión pública: “Sea bendito el Dios de ellos”. Y la estatua quedó olvidada.

Dios hizo un milagro poderoso como resultado de la fe de estos tres jóvenes. En los versículos 17 y 18, ellos declararan que creen que el Señor los librará de la muerte, pero que, si no, con todo ellos no dejarán de honrarlo, y prefirieron ser arrojados al horno de fuego que cometer idolatría. Y según la Biblia, fue el Señor Jesucristo quien vino a su rescate. No hay manera de saber si los jóvenes habían leído a Isaías, quien doscientos años atrás había escrito «Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama arderá en ti. Porque yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador.» (Isaías 43:2-3) Pero lo que si podemos decir es que esa promesa poderosa de Dios se cumplió en ellos, y se cumplirá en todos quienes resistan la presión del mundo actual que quiere hacernos arrodillar ante los ídolos de los tiempos actuales: cantantes, actores, deportistas, hombres y mujeres famosos, la moda, el consumismo, la vanidad, el mundo cibernético, las drogas, las perversiones sexuales, la televisión, el ego, etc., etc.

Así mismo, Dios destruirá a todos aquellos que osen hacer daño a Sus ungidos, como el caso de los guardias que murieron quemados y ajusticiará a aquellos que se llaman cristianos, pero que se mueven en medio de los instintos del mundo como la envidia, el celo, el chisme, la calumnia. YHWH es el más puro amor, pero también el temible fuego consumidor. Êl castiga a todos los que viven vidas de pecado y no se arrepienten, así sean cristianos. Que terrible lo que se enseña en muchas iglesias y denominaciones, que luego de haber sido salvados por la conversión a Jesús, no tienen mas pecados que confesar porque ya son santos. Esas iglesias están muriendo poco a poco por causa de esta doctrina anatema, pues la Biblia nos manda a justificarnos en la sangre del Cordero TODOS los días, porque nadie está libre de pecado. Cierto que la salvación no se pierde, porque no es por obra del hombre sino por la gracia de Dios. Pero los que pecan y no se arrepienten, se quedarán en el día del Rapto a sufrir todos los horrores de la Tribulación que la Biblia advierte.

Hermano, hermana, si te dijeran que si no negares a Jesús serás arrojado a un horno de fuego, ¿crees que el Señor vendrá y te salvará, o hay dudas en tu corazón? Si te preguntaran si tienes pecados que confesar, ¿qué responderías? La salvación no es un juego, la pronta venida del Señor Jesucristo por Su pueblo tampoco. Ponte a cuentas, podría ser que esta noche suenen las trompetas, para todo el mundo, o para ti. Que YHWH se apiade de nosotros.

התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 1 Crónicas 10 - 12; Juan 6:45-71 
Descargue el devocional en PDF: Jesucristo tu salvador

YHWH Jirêh

Devocional para hoy,
Miércoles 16 de Mayo, 2018.

“YHWH Jirêh”
Por: CF Jara

Leer: Lucas 12:13-59
«Manténganse libres del amor al dinero, y conténtense con lo que tienen, porque Dios ha dicho: Nunca te dejaré; jamás te abandonaré.» (Hebreos 13:5)

El pueblo de Israel ha sido bendecido por el Señor YHWH desde el principio de su historia y a través de todos los tiempos. Pero también, la pobreza y necesidad extrema los ha azotado en diferentes épocas. Cuando abandonaron Egipto liderados por Moisés, los hebreos se llevaron gran riqueza en metales preciosos y propiedades como los hatos, ganados y rebaños. Pero esa riqueza desapareció poco antes del tiempo de los Jueces, y la hambruna y muerte los azotaron por más de 450 años, hasta el reinado de David y luego de su hijo Salomón, quienes trajeron para el pueblo gran prosperidad. En los tiempos de Jesús, en las regiones que hoy conocemos como territorio de Israel, nuevamente la pobreza se extendía por todas partes, debido principalmente, al dominio brutal de Roma, quien, a través de los impuestos y con su ejército de por medio, había sometido al pueblo de Dios a una explotación cruel. De hecho, esta realidad la podemos palpar en la Biblia, en los relatos de los escritores de los evangelios. Jesús nació, creció y maduró Su ministerio en medio de esa penuria terrible. Sin embargo, la pobreza masiva no significa que no había riqueza, sino que ésta era amasada por unas pocas manos y quienes se beneficiaban del trabajo y sacrificio del pueblo eran los comerciantes, políticos, autoridades, la jerarquía militar y religiosa y por supuesto, los chulqueros o prestamistas de dinero. A todos éstos fue que Jesús confrontó con Su discurso, por el amor de ellos al dinero y su impiedad con los desposeídos, pero, sobre todo, los condenó a la muerte eterna, cerrándoles los cielos al declarar que «más fácil es que pase un camello por el ojo de una aguja, que un rico al reino de los cielos.» (Marcos 10:25).

Según los datos poblacionales manejados por la ONU, a través de los años, siglos y milenios, del 20 al 30 % de la población mundial, -promedio-, ha vivido y vive en extrema pobreza, sin tener nada que llevar a sus estómagos por días enteros; un 10-20% viven en el límite de la pobreza y un 50-60% son parte de lo que se llama la clase media, la cual vive para trabajar hasta que las fuerzas le abandonan. Solamente un 8-10% de la población mundial vive con abundancia, en extrema opulencia. Ellos amasan el 84% de toda la riqueza mundial comprendida en dinero en efectivo, oro y metales preciosos, diamantes y piedras preciosas, títulos de propiedad de carros, mansiones y patrimonios extensos, sin que les inquiete un segundo los miles de niños que mueren a diario alrededor del mundo por causa del hambre.

Nosotros, el remanente, el pueblo redimido, descansamos en las promesas de provisión y cuidado de Dios, quien nos proveerá para lo que necesitemos, conforme a Sus riquezas en gloria. Por otro lado, la Palabra nos enseña a compartir con los que necesitan de lo que necesitamos, no de lo que nos sobra, porque ¿qué virtud hay en dar de lo que no necesito? La virtud transformadora de las Escrituras poco a poco nos va alejando del mundo consumista en el que habitamos, aprendemos a contentarnos tanto en la abundancia como en la necesidad, sin caer ni en la envidia, avaricia o vanidad. La Palabra también nos enseña que, si un hermano de la fe nos pide prestado, que le prestemos y no cobremos interés por ello, y si hacemos negocio vendiendo o comprando, no saquemos provecho del hermano perjudicándolo con nuestra astucia.

DIOS lo ve todo, lo sabe todo y está en todas partes. Honremos Su santo nombre viviendo una vida cristiana verdadera, sin fariseísmos ni hipocresías religiosas; dando y ayudando, siendo solidarios y compasivos, evitando caer en los excesos mundanos del consumismo, que solamente nos vuelve incapaces de dar al que nos extiende la mano, porque recuerda que «Cuando no tuve trabajo, no me diste de comer y de beber; cuando no tuve donde dormir, no me ofreciste una cama y techo; cuando estuve enfermo, triste o abandonado, no me consolaste; si caí en la cárcel, no viniste a verme. Porque todas estas cosas que hiciste a uno de mis pequeñitos, a mí me las hiciste.» ¡¡Santo es el Señor!!

Oración
«Señor Padre Eterno, gracias te doy hoy en este día Señor, por todos mis hermanos y amigos, especialmente por aquellos que oran y proveen para éste que es Tu ministerio. Tú eres el dueño de todo el oro, de toda la plata y de todas las riquezas que hay en el mundo. Enséñanos Señor a ser mas generosos, caritativos, solidarios, sensibles, desprendidos; que podamos entender que hay una doble bendición en dar antes que en recibir. Que podamos abrir nuestras manos para soltar aquello de lo que nos estamos sujetando, para recibir las bendiciones que tienes para Tu pueblo, porque dices en Tu Palabra, ¿cómo he de poder recibir lo que Tú tienes para mi sino abro primero mis manos? Y te oro también Señor por todos aquellos que a esta hora pasan por hambres y necesidades, que son millones alrededor del mundo, manda Tus ángeles, Señor, con la provisión, que llegue a tiempo, remecida y justa; que calme su hambre y sacie su sed, te lo ruego en el Todopoderoso nombre de Tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén.»


התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 2 Reyes 24 - 25; Juan 5:1-24
Descargue el devocional en PDF: YHWH Jirêh

Llamado para Valientes

Devocional para hoy,
Lunes 14 de Mayo, 2018.

“Llamado para Valientes”
Por: CF Jara

Leer: Mateo 4:13-25
«Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres.» (Mateo 4:19)

Al principio de Su ministerio, Jesús bajó al río Jordán para ser bautizado por Su primo, Juan el Bautista; luego fue al desierto donde ayunó por 40 días con sus noches y volviendo de ahí, fue a Capernaum, una ciudad muy querida para Él, ubicada a la orilla del mar de Galilea, en la región de Zabulón y de Neftalí, la misma que se menciona en la profecía del profeta Isaías. Allí fue donde el Maestro comenzó a predicar diciendo: «Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.» Y fue en esa región, mientras caminaba por las orillas del mar de Galilea, cuando Jesús empezó a llamar a quienes serían, primero Sus discípulos y luego Sus apóstoles. El primero en ser llamado fue Andrés, luego su hermano Simón, ambos se ganaban la vida como pescadores. Jesús se acercó a ellos, y sin ellos haberlo visto antes, les dijo: «Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres.» Y ellos, dejando las redes a un lado y sin preguntar o cuestionar nada, fueron y le siguieron. Jesús después llamó a Jacobo, a Juan y al resto.

Mil doscientos cincuenta años antes, Moisés se encontraba pastando las ovejas de su suegro en el desierto, al pie del monte Horeb, cuando vio una zarza ardiendo. Entonces escuchó la voz de Dios llamándolo para que sacara a Su pueblo de Egipto y lo libertara de Faraón. Moisés cumplió el llamado del Señor, y por cuarenta años condujo a más de tres millones de hebreos en una tarea gigantesca que al final, le costó la vida justo antes de entrar en la tierra tan anhelada. Al igual que el patriarca israelita, los primeros apóstoles (excepto Juan que murió de anciano y Judas Iscariote que se suicidó) y luego los cientos de miles de líderes y creyentes en el Señor Jesucristo, sufrieron terribles torturas y/o murieron como mártires mientras se encontraban predicando el mensaje de los Evangelios. Aquí un resumen breve de la muerte de los discípulos:

Andrés, fue condenado por el gobernador Aepeas y murió crucificado en el año 63 d.C., en Acaya, Grecia, en una cruz en forma de X.

Santiago, el Mayor, predicó en Jerusalén y Judea y fue decapitado por Herodes, en el año 44. Fue el primer mártir de los doce.

Bartolomé, fue misionero en Armenia. Su primer nombre era Natanael, a quién Jesús llamó “un verdadero Israelita, en quien no hay engaño.” (Juan 1,47). Se dice que predicó con Felipe en Phrygia y Hierápolis; también en Armenia e India donde murió despellejado vivo con cuchillos.

Santiago, el Menor, o el más joven, fue el hermano del Apóstol Judas y el “hermano del Señor” (Mc 6,3). Es el autor de la carta del Nuevo Testamento que lleva su nombre. Predicó en Palestina y Egipto donde fue crucificado por el sumo sacerdote Anás II, quien le ordenó renegar de Jesús, pero Santiago, que estaba en lo alto del templo, aprovechando la concurrencia se puso a predicar el Evangelio. Al escuchar esto los fariseos y escribas se llenaron de furor y uno de ellos lo empujó desde lo alto. Santiago no muere al instante, sino que es apedreado mientras rogaba a Dios de rodillas por sus asesinos. Como tardaba en morir, es golpeado en la cabeza con una maza.

Judas Tadeo, o Lebeo, hermano del Apóstol Santiago. Predicó en Asiria y Persia y murió como mártir en este país donde le cortaron la cabeza con un hacha, en el monte Ararat. Su epístola o carta forma parte del Nuevo Testamento.

Mateo, Leví, o “hijo de Alfeo”, como cobrador de impuestos, era considerado un criminal. Él escribió el evangelio que lleva su nombre. Fue martirizado por oponerse al matrimonio del rey Hirciaco con su sobrina Ifigenia, la cual se había convertido al cristianismo por la predicación del Apóstol. Murió decapitado con una espada, en Etiopía.

Pedro, Simón Pedro, hizo trabajo evangelístico y misionero entre los judíos, yendo tan lejos como a Babilonia. Fue crucificado en Roma con la cabeza hacia abajo. Pedro solicitó que lo crucificaran así porque no era digno de morir como su Señor había muerto.

Felipe, junto con Andrés, son los únicos que tienen nombres griegos entre los apóstoles. Felipe es quien invita a Natanael a conocer al Señor (Juan 1:45) Predicó en las regiones de Frigia, actualmente Turquía, y Escitia, actualmente Moldavia, Ucrania, Hungría y el este de Rusia. Fue crucificado y apedreado y murió como mártir en Hierapolis.

Simón, Cananeo o Zelote, predicó el Evangelio en Samaria y casi todos los lugares conocidos de ese entonces, incluyendo Gran Bretaña, el Mar Negro, Egipto y el Norte de África. Murió luego de ser crucificado cuando era obispo de Jerusalén.

Tomás, el incrédulo, quien dice en Juan 20:25 que «a menos que vea las marcas en las manos de Jesús y en su costado, él no iba a creer.» Predicó el Evangelio a los partos, medos, persas e hircanios, y después pasó a la India y a Japón. Sufrió el martirio y muerte con lanzas en la costa de Coromandel, India.

Juan, Boanerges o “Hijo del Trueno”, fue conocido como el discípulo amado. Escribió el Evangelio y las epístolas 1º, 2º y 3º que llevan su nombre, así como el Libro de las Revelaciones de Jesucristo o Apocalipsis. Predicó entre las iglesias de Asia Menor. Estuvo desterrado en la Isla de Patmos por muchos años. Liberado más tarde, murió de muerte natural en el año 100 d.C. Sufrió un atentado en contra de su vida mediante un cáliz con veneno del cual Dios lo salvó. El único de los apóstoles que murió de causas naturales.

Judas Iscariote, el traidor, vino de Judá, cerca de Jericó. Él era el único judío mientras que el resto de los discípulos eran Galileos. Fue el tesorero del grupo y estaba entre los líderes del grupo. Traicionó a Jesús por treinta piezas de plata y luego se ahorcó (Mateo 26:14,16).

Oración
«Hermanos, cuando Jesús nos llama a Su servicio, tenemos que estar dispuestos a ofrendar todo, incluso hasta nuestras vidas. Dos cosas nos pasarán por seguro, la una al principio y la otra, durante todo nuestro caminar, hasta el final. Primero, tendremos que dejar nuestra zona de confort, de comodidades, de bienestar, para poder ser usados donde el Señor quiera y cuando Êl lo disponga. Y la segunda, necesitamos estar preparados porque sufriremos odio, rechazo, envidia, agresiones, calumnias, soledades, desprecios, persecuciones, y hasta muy posiblemente la cárcel y muerte por causa de predicar la Palabra del amor, perdón y esperanza que ofrece Jesucristo a la humanidad. Sin embargo, sea lo que sea que suceda en nuestras vidas, debemos declarar a diario que, si he de vivir, aunque sea en medio del dolor, que sea en Cristo; y si he de morir por causa de Su nombre, entonces que muera, porque, así como fue con los primeros profetas y apóstoles y luego con los miles de creyentes en Jesucristo que han muerto desde entonces, la redención en Cristo es ofrecida a todos, pero el llamado a servirlo, es solo para los valientes. Oramos y damos las gracias a Dios por Su llamado, en el Todopoderoso nombre de Tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén.»


התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 2 Reyes 17 - 18; Juan 3:19-36 
Descargue el devocional en PDF: Llamado para Valientes

Y Yo estaré contigo, hasta el fin

Devocional para hoy,
Viernes 11 de Mayo, 2018.

“Y Yo estaré contigo, hasta el fin”
Por: CF Jara

Leer: Génesis 21
«…Y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.» (Mateo 28:20)

Era una fría tarde de aquel Miércoles 28 de Noviembre del 2001, en la ciudad de Chicago. Las calles estaban cubiertas por el peligroso y traicionero “hielo negro” producto de las nevadas de los días anteriores. Me encontraba trabajando como valet-parking, y mientras corría a traer un vehículo, resbalé y perdí el equilibrio. Al caer, puse mis manos para no golpear mi cara contra el piso. Gracias a DIOS no me golpeé, pero sentí un corrientazo eléctrico que subía desde la punta de los dedos de mi mano derecha, recorría por todo el antebrazo, el brazo, el hombro, el cuello y se concentraba en un punto de la cervical causándome un terrible dolor. Con el pasar de los días, el dolor era más fuerte, el brazo derecho dejó de funcionar y una enorme hinchazón crecía justo debajo del cuello. Días más tarde, el 12 de Diciembre, y sin poder soportar más el dolor, entré a emergencia del hospital adventista de Irving Park. El diagnóstico fue de una fisura entre la cuarta y quinta vértebras, que necesitaba de cirugía urgente que fue programa para el Sábado 15 de esa misma semana, a las 9am. Los doctores me mencionaron el bajo porcentaje de completa recuperación para ese tipo de operaciones, el riesgo de invalidez total temporal de entre 3 a 12 meses y la prohibición a realizar cualquier actividad deportiva de por vida. Una vez más una daga filuda pendía sobre mi destino.

La razón por la que soy cuidadoso con incluir datos exactos es para respaldar el testimonio de lo que sucedió alrededor de este evento. Eran las 6am del día de la cirugía. Yo estaba dormido en la camilla del hospital, listo para la operación, conectado a cuanto electrodo y alambre se pueda imaginar, cuando de pronto, escuché la voz de DIOS clara y audible, que susurró al oído mi nombre y una orden: «César, César, levántate y vete a casa.» Recuerdo que abrí los ojos, a mi lado no había nadie, solo las máquinas. Me senté en la camilla, procedí a desconectar todos los diodos y catéteres, y me dirigí al locker a buscar mi ropa. Las enfermeras al verme trataron de detenerme, e incluso llamaron a seguridad, pero yo estaba determinado a obedecer la orden de DIOS. Luego de firmar el descargo legal de responsabilidad, salí del hospital y me dirigí al apartamento donde vivía junto con un primo.

Los días siguientes fueron de mucha incertidumbre. Mi principal preocupación eran mi esposa y sobre todo mis hijos, que aún estaban pequeños ¿Cómo iba a hacer para proveer para ellos? La morfina era lo único que me daba alivio. No podía estar de pie, ni sentado, solo acostado boca abajo. Y así estuve hasta la noche del Martes 18. Eran las 11:15pm cuando sentí que el Señor entró a mi cuarto, solo recuerdo que mi espíritu lo reconoció. Entonces puso Sus dos manos con los dedos entrecruzados sobre la hinchazón de la cervical y presionó hacia abajo por dos ocasiones luego de lo cual quedé dormido por completo. Horas más tarde, a las 5am desperté, me levanté rápidamente, y mientras estaba duchándome para ir a trabajar, me di cuenta que la mano derecha estaba funcionando sin problema, el dolor y la hinchazón habían desaparecido.

DIOS había hecho otro milagro portentoso. Seis meses más tarde regresé a Orlando, empecé a trabajar en una compañía de “landscaping”. Aquel día me encontraba reparando un toldo metálico de piscina, cuando el parante de la escalera de madera en la que estaba parado se rompió y fui cayendo de espalda hasta golpear el piso. Aunque me sentía bien, los compañeros me llevaron al doctor, a quien expliqué el accidente, pero también la lesión adquirida meses atrás en Chicago. Luego de tomarme placas de CTScan y CATScan, el doctor, muy sorprendido, me preguntó por tres ocasiones si me había olvidado que fui operado, pues en dichas placas aparecía la fisura pero soldada de una manera perfecta, y me preguntaba el nombre del cirujano que me había operado. Entonces le compartí mi testimonio, y él, maravillado dijo: “solo Dios puede hacer cosas como éstas” y me entregó las placas que aún conservo como las pruebas fehacientes de aquel milagro.

Diecisiete años más tarde aquí estoy; camino, nado, hago bicicleta, juego fútbol, cargo maletas, hago viajes misioneros, subo montañas, etc., etc. No comparto esto para ufanarme de lo que el Señor ha hecho en mi vida, porque yo sé que no me merezco nada de lo que Dios me da, ni un solo minuto de vida, sino para sembrar la esperanza en algún hermano o hermana que lea esto, de que cuando el Señor te dice que lo va a hacer, cree, porque Êl lo hará, y de manera excelente. No puedes dejar que la duda entre en tu corazón, sino creer y obedecer, porque al creer verás la gloria de Dios, y al obedecer recibirás la corona de la victoria, y las gentes se asombrarán de las obras del Eterno y lo buscarán.

Oración
«Hoy no voy a orar, sino a declarar que, solo por la gracia del Dios Omnipotente, yo seguiré construyendo, soñando, orando, creyendo, amando y cantando a la vida, por encima de todas las circunstancias adversas que golpeen mi vida, porque yo sé que existe alguien que me ama con un amor infinito y eterno, que mi mano sostendrá siempre, hasta el fin. Si una puerta se cierra aquí, otras puertas se abrirán allá. Solo necesito confiar más en Dios porque Él es quien cuida de mí, porque Él cumple todo lo que promete. Alabado sea Su santo nombre, por siempre y para siempre, en el Todopoderoso nombre de Yeshûa HaMashiaj, amén.»


התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 2 Reyes 13 - 14; Juan 2 Descargue el Mensaje de hoy en PDF: Y Yo estaré contigo, hasta el fin

Controla la lengua

Devocional para hoy,
Miércoles 9 de Mayo, 2018.

“Controla la lengua”
Por: Bill Crowder
Edición: CF Jara

Leer: Santiago 3:1-12
«Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. […] está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo…» (Santiago 3:6)

Corría el año 49 a.C. cuando el emperador romano Julio César cruzó el río Rubicón con su Legión xiii para entrar en Italia, en un acto que fue considerado como traición por otros generales, senadores, pensadores y pueblo en general de Roma. El caso era que, por la ley del imperio, ningún general romano podía introducir sus tropas armadas en Roma. El impacto de esa decisión fue irreversible, pues a ese incidente no bien pensado por el emperador, le siguieron años de guerra civil, con mucha sangre derramada y costos grandísimos por los recursos usados y por las destrucciones causadas. Por ello en los días actuales, la frase «cruzar el Rubicón» es una metáfora de «llegar a un punto donde no hay retorno», con consecuencias terribles no deseadas, producto de decisiones mal tomadas.

Algún sabio dijo alguna vez que hay tres cosas que los seres humanos no podremos recuperar jamás, una vez que se fueron: el tiempo, la vida y las palabras que salen de nuestra boca. A lo largo de nuestra existencia, todos podemos cruzar un ‘Rubicón’ cuando no pensamos las palabras que vamos a decir, pues una vez dichas, no podrán volver atrás. O brindan ayuda y consuelo, o producen un daño tan irreversible como el que produjo la marcha del César a Roma. El apóstol Santiago ofrece otra descripción acerca de este tema, cuando dice: «la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno» (Santiago 3:6).

Santiago fue probablemente, la persona que más conoció al Jesús humano, pues como medio hermano del Señor compartió su infancia y juventud al lado del Hijo del Hombre. Y si bien es cierto que, en los primeros años del ministerio del Maestro, tanto Santiago como el resto de Su familia no creían en el Señor ni lo apoyaban, cuando el discípulo atestiguó todo el evento majestuoso de la resurrección, se declaró él mismo siervo y propiedad de Jesucristo, y escribió esta epístola donde el comparte la sabiduría que aprendió del Maestro, incluida la teología franca, sencilla y poderosa acerca del poder de vida o muerte que reposa en la lengua de hombres y mujeres.

Si tememos haber cruzado el Rubicón contra alguien, podemos pedirle perdón a esa persona… y a Dios (Mateo 5:23-24; 1 Juan 1:9). Y para evitar cometer el terrible error de dejar nuestra lengua suelta, aprendamos a depender cada día del Espíritu Santo que nos dice: «Sea vuestra palabra siempre con gracia.» (Colosenses 4:6) no solo para honrar al Señor, sino también para edificar y alentar a quienes nos rodean, con palabras llenas de amor, bondad y paciencia, en lugar de chismes, críticas y escarnio. La gloria sea para el Altísimo.

Oración
«Señor Padre Eterno, mi oración para hoy es pedirte ayuda para poder medir mis palabras hoy y por siempre, en todas las conversaciones que sostenga, con conocidos, pero también con aquellos que no conozco. Que esta lección se quede grabada en mi cerebro para recordar siempre que es mejor decir palabras amables en lugar de respuestas amargas, aun cuando aquellos que fabrican escarnios en contra nuestra, sigan caminando campantes como si nada hubieran hecho. Te ruego mi Señor, que, si aquellos quieren ofender, hablar mal a mis espaldas, levantar falsos en mi contra, que lo hagan Señor, porque no sé ellos, pero yo y mi casa, serviremos al Señor, y de mi boca, no saldrá palabra negativa contra nadie jamás. Que la luz de Cristo pueda reflejarse a través mío en todo momento, y que esa sea mi mejor respuesta a los que buscan mi mal, te lo ruego en el Todopoderoso nombre de Tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén.»


התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 2 Reyes 7 - 9; Juan 1:1-28

Descargue el devocional en PDF: Controla la lengua

Perdonad para ser libres

Devocional para hoy,
Lunes 7 de Mayo, 2018.

“Perdonad para ser Libres”
Por: CF Jara

Leer: Lucas 6:17-49
«No juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados.» (Lucas 6:37)

Jesús había roto por dos ocasiones la religiosidad del sábado, permitiendo que sus discípulos usaran sus manos para limpiar las espigas del trigo y comieran, para horas más tarde, dirigirse con todos ellos a la sinagoga, donde curó al hombre de la mano seca. Al día siguiente, el Maestro escoge de entre la multitud de seguidores a los doce, a quienes llama “apóstoles”. Entonces Jesûs, acompañado por aquellos y el resto de seguidores cercanos se dirigen hacia el llano ubicado en la orilla occidental del lago de Galilea, al pie de lo que hoy conocemos como el “monte de las Bienaventuranzas”. Y allí, el divino Rabino declama Su discurso más bello, conocido y poderoso, que se basa en tres puntos principalmente: 1) la esperanza de redención para los pobres y desposeídos; 2) el castigo eterno para los ricos de este mundo; y 3) la orden de buscar el perdón de Dios, pero, sobre todo, perdonar a los que nos hacen mal.

Esque el Maestro sabía de antemano el terrible poder destructivo del no perdón; Jesús sabía que cuando las personas se guardan los malos recuerdos de las ofensas, sus cuerpos se terminan pudriendo por dentro, pues debido al orgullo que se genera de una decisión de no perdonar una ofensa por más pequeña que esta sea, da lugar al nacimiento, crecimiento y expansión de las raíces de amargura mortíferas para la vida, y que a pesar de que las personas saben que la amargura que sienten no es buena, así y con todo continúan su vida, sin querer perdonar, porque creen, erróneamente, que al perdonar a aquel que les hizo mal lo bendecirán, y se mantienen allí, en el no perdón, tercamente, hasta cuando el terrible cáncer aparece y empieza a corroerles la vida.

El Dr. Charles Stanley dice que "el resentimiento es como agarrar a una serpiente por la cola, es inevitable que en cualquier momento me muerda". El resentimiento es una palabra compuesta que tiene el prefijo 're' que indica la condición de repetición, en este caso de un sentimiento dado. Cuando somos ofendidos, el sentimiento que aflora es el dolor, lo cual es un proceso normal en la esencia del cuerpo humano. Pero cuando le permitimos a la mente que siga recordando aquella ofensa, impedimos que el corazón perdone y por ende, el cuerpo sufre una y otra vez de aquel dolor. Sin embargo, lo grave es que el cuerpo pasa de la reacción normal a otra serie de reacciones químicas donde ciertos órganos relacionados con las emociones como el hígado, empiezan a verter ácidos en el estómago en cantidades anormales, lo cual termina envenenando la sangre, la cual se convierte en el vehículo de aquel veneno, que en cierto momento se deposita en alguno de los órganos del cuerpo, y ahí aparece el cáncer, así de fácil pero así de terrorífico.

La Asociación Estadounidense de Médicos ya ha aceptado tácitamente que la causa principal para el cáncer en los seres humanos es la acumulación de recuerdos negativos, en otras palabras, la negativa de la persona a perdonar las ofensas recibidas.

Pero ¿que impide al ser humano perdonar? El orgullo, el orgullo, solo el orgullo. Más cuando hemos sido salvados y rescatados por el amor de Jesús, debemos someter ese orgullo al pie de la cruz para poder perdonar a otros, así como se nos ha perdonado a nosotros. Sin embargo, aun en la iglesia de Cristo hay creyentes que no perdonan y caminan llenos de orgullo, pero también llenos de resentimiento, saboreando la amargura en su boca y sufriendo los pre cuadros de posibles enfermedades como el cáncer, la artritis, presiones altas, etc.

El llamado a esta hora es: ¿Cómo está tu corazón? ¿Tienes algún resentimiento guardado? Si es así, hoy día, este momento que estas leyendo esto es el momento para que perdones aquella ofensa para siempre. Haz la oración siguiente en voz alta, menciona el nombre de la persona que te ofendió, declara que la perdonas en el nombre de Jesûs, y clama a Dios para que la bendiga y prospere donde quiera que esté. Al terminar la oración, sentirás una paz que no la habías sentido antes, y el alivio recorrerá por todo tu cuerpo, la sangre de Cristo cubrirá todos tus órganos y si hay alguna enfermedad producto de haberte guardado el perdón, saldrá de tu cuerpo en el nombre de Jesûs y serás sano, sana de nuevo.

El perdón abre las puertas de los cielos a nuestro favor, porque con el perdón honramos el sacrificio de Jesûs por nosotros en la cruz.

Oración
«Padre Eterno, Tú conoces Señor mi corazón, sabes mis mas íntimos sentimientos, secretos, ideas y necesidades, y sabes los nombres de aquellos a quienes no he perdonado. Hoy te pido Señor, que me ayudes a perdonar, quiero honrar Tu amor y sacrificio por mi en la cruz, y declaro en el nombre de Jesûs que perdono a ________ ; te ruego por esta persona, Dios santo y Todopoderoso, Tú sabes quién es, Tú conoces los detalles de lo sucedido; Tú sabes el dolor que causó a mi alma lo que aquel hizo, pero hoy soy obediente a Ti y lo perdono, bendícelo donde quiera que esté, guárdalo de todo mal; sé con este hijo tuyo en la necesidad que tenga este momento y ayúdale mi Señor, así como bendice a toda su familia, su trabajo, su salud; dale sabiduría, provee lo que necesite y guárdalo Señor, en el hueco de tu mano, yo lo perdono, y me declaro libre para siempre de este sentimiento pero también de cualquier problema de salud que haya generado este dolor en mi cuerpo, te lo ruego en el Todopoderoso nombre de Tu Hijo amado Yeshûa HaMashiaj, amén.»


התהילה היא רק של ישוע המשיח
DIOS te bendiga.

Lea la Biblia en un año: 2 Reyes 1 - 3; Lucas 24:1-35 

Descargue el Mensaje de hoy en PDF: Perdonad para ser libres

YHWH, el Dios que camina entre Su pueblo.


YHWH, el Dios que camina entre Su pueblo.

Elohim -DIOS. 
Adonai -Señor,Master. 
El Qanna -Dios Celoso.
Yahweh -Señor,Jehovah.
El Elyon -El Dios Altísimo.
El Shaddai -Señor Dios, Altísimo.
YHWH Rapha -El Señor te sana.
YHWH Jireh -EL Señor te provee.
YHWH Shalom -EL Señor es la paz.
YHWH Raah -El Señor es mi pastor.
YHWH Nissi -El Señor es mi estandarte.
El Olam -El Dios por siempre Eterno.
YHWH Tsidkenu -El Señor de nuestra justicia.
YHWH Shammah -El Señor esta aquí.
YHWH Sabaoth -El Señor de los ejércitos.
YHWH Mekoddishkem -El Señor te santifica.

Ministerios Cristianos Mundiales "Îshu-nejar"
http://www.ministeriosishunejar.com